Deforestación, una actividad que crece en Tarija

La tala descontrolada de árboles, conduce directamente a la deforestación, causando erosión, deslizamientos de tierra e inundaciones.
La deforestación, dañó la integridad de los ecosistemas, aumentó el riesgo de desastres naturales y amenaza la biodiversidad, misma que es esencial para la reproducción saludable de varias especies agrícolas y forestales.
El director del Programa Ejecutivo de Rehabilitación de Tierras de Tarija (PERTT), Marcelo Vacaflor Pérez, explicó que en diferentes zonas del departamento, especialmente en el Gran Chaco, la deforestación no está siendo manejada con un plan.
Según Vacaflor, la Autoridad de Fiscalización y Control Social de Bosques y Tierra (ABT) en Tarija es la encargada de ejercer el control respectivo de los árboles que son talados.
“Veo que las instancias correspondientes, por ejemplo la ABT, no hacen el trabajo como deben efectuarlo en realidad, por este motivo, los comunarios generan ingresos con este tipo de maderas”, indicó.
Sin embargo, Vacaflor, señaló que en la provincia Cercado pasa exactamente lo mismo, por ejemplo, la comunidad de Vallecito Ruiz, es considerada un generador de agua y un pulmón que da oxígeno para los habitantes de la ciudad de Tarija.
“Esta una zona que divide a O’Connor con Cercado, es un cerro muy bonito, ahí no existe ningún control forestal, en este tipo de lugares, ya se ve como una tradición, cómo extraen madera ilegalmente, con burros anteriormente, pero ahora hasta con carretas hechizas”, reveló.
Este tipo de actividades son realizadas en comunidades alejadas y no muy conocidas.
El funcionario del PERTT, institución dependiente de la Gobernación, explicó que una vez que las empresas, especialmente las petroleras, ingresan a estos espacios verdes, son los momentos que marcan y más hieren a la naturaleza.
“Ahí nunca existió un manejo forestal, porque no sé con qué criterio ingresan en la búsqueda de petróleo y gas, ya que hacen senderos o caminos muy grandes, los que se hacen con cualquier tipo de maquinaria”.
El secretario de Medio Ambiente de la Alcaldía tarijeña, Álvaro Orozco Herbas, enfatizó que cuentan con políticas “agresivas” de deforestación; pero indicó que en Bolivia, los problemas más serios se encuentran en el oriente.
“En el Chaco boliviano también tenemos problemas, desafortunadamente, devoramos bosques para el tema del carbón vegetal”, indicó.
Según Orozco, la Alcaldía es un consumidor de este carbón, por lo que deben implementar algunas medidas para mitigar esta situación.
Según un informe denominado “Opciones de tala” publicado en el diario El Proceso, el gran factor de la tala desmedida en el Gran Chaco, ubicado en los países de Argentina, Bolivia y Paraguay, es la producción del carbón vegetal para barbacoas o parrillas, que también es utilizado para su exportación.
Orozco, dijo que en Cercado, la principal fuente de deforestación, tienen como fin ampliar la frontera agrícola, una actividad que también reforesta, pero en pocas escalas.
Acciones institucionales
Hace unos seis meses, el PERTT, ingresó a la reserva natural de flora y fauna de Tariquía con el fin de cosechar semillas de las especies de árboles que ya son catalogados en peligro de extinción.
“Por ejemplo de la quina, el cedro y otras variedades que se encuentran en grandes cantidades dentro de esta zona, pero al ser deforestada, no hay quién la pueda volver a forestar”, indicó.

El PERTT, según Vacaflor, está “experimentando” en el campo de reproducción y reinserción de estos plantines en las zonas o espacios que representan mayor índice de deforestación.
Un proyecto que busca implementar esta institución, es la creación de un equipo denominado “bomberos forestales”, que aún está como una “idea”.
Un grupo de capacitación ya está trabajando en diferentes zonas para prevenir las acciones en caso de un incendio forestal.
En el caso de Cercado, según el secretario de Medio Ambiente de la Alcaldía, Álvaro Orozco, se tiene un reglamento que es aplicado por la Unidad de Ornato Público; pero no pueden aplicar en espacios privados.
“En lugares privados lamentablemente no se aplican, lo que sí se piensa hacer como una propuesta que se hizo al Concejo Municipal, es generar alicientes a las personas que mantengan masas arbóreas dentro de sus domicilios”, explicó.
Si una persona, demuestra que tiene más de tres árboles dentro de sus domicilios, según Orozco, podría trabajarse en un proceso aliciente administrativo impositivo, de forma que el propietario mantenga este espacio arbóreo.
“Es un problema, porque las personas miran y valúan al árbol como un problema más que como una solución, estamos en este proceso, esperamos que a corto plazo nos redite en masas arbóreas o parques urbanos, que es lo que necesitamos en el municipio”, aclaró.
Incendios,
Del 9 al 13 de agosto de la gestión pasada, el incendio reportado en la reserva natural de Sama, provocó la pérdida de unas 10.600 hectáreas y cegó la vida de tres personas.
Sobre el tema, el director del PERTT, Marcelo Vacaflor, explicó que en este sector, cuando ocurre un incendio, se dificulta el ingreso de un equipo de auxilio para sofocar el mismo.
Por eso propuso la implementación de senderos que separen los árboles de un extremo a otro, de esta manera, el incendio no se expandirá y permitirá al equipo correspondiente un ingreso oportuno a la zona.
“De esta manera, podremos ingresar con camiones cisternas u otro tipo de instrumentos para apagar el fuego”, afirmó.
Vacaflor, solicitó la construcción de atajados, mismos que permitirán la cosecha de agua y la atención a espacios que cuenten con cosechas.
Cabe destacar que la pérdida de cobertura arbórea en Brasil e Indonesia, representa más de la cuarta parte de la pérdida de cobertura arbórea mundial.
Otros países experimentaron pérdidas masivas relacionadas a incendios hasta el año 2016.
Un estudio de la fundación alemana Friedrich Ebert Stiftung (FES), calculó en 2010, que Bolivia pierde anualmente 350 mil hectáreas de bosques debido a las actividades, tanto legales, como clandestinas.
De esta cifra, estima que unos 320 metros cuadrados por persona, se pierden en los bosques anualmente; según la FES, este número significa unas 20 veces más que el promedio mundial, es decir, de 16 metros cuadrados por persona.
A este ritmo, que no se ha reducido en los últimos años, sino aumentado, los bosques de Bolivia podrían desaparecer para el año 2100, de acuerdo al FES. (eP).

Investigación de Earthsight sobre la deforestación en el Gran Chaco
De acuerdo con una amplia investigación del grupo ecologista británico “Earthsight” publicado en enero del 2017, el nivel de deforestación en el Gran Chaco crece año tras año y la región prevé perder más de 200 mil hectáreas de bosques tropicales.
Según “Earthsight”, la especie de árbol más buscada es el quebracho blanco, considerado entre los más grandes de la región y de gran importancia para grupos indígenas como los ayoreo-totobiegosode, que recogen de sus ramas la miel de panales de abejas.
El Gran Chaco incluye ríos como el Pilcomayo, el Teuco, el Bermejo y el Paraná; sierras como la Pampeanas y Subandinas, además de lagunas como la de Mar Chiquita.
Esta organización, afirmó que la empresa “Bricapar” es la responsable de producir carbón vegetal en un área del Chaco, donde los bosques tropicales son deforestados de forma no sustentable y algunos de sus productos terminan en las góndolas de supermercados en la Unión Europea y Estados Unidos.(eP).
losDATOS
La investigadora Lykke Andersen, del Instituto de Estudios Avanzados en Desarrollo (Inesad) y autora de una investigación sobre la deforestación, señaló que “solo hay tres países del mundo con más deforestación per cápita que Bolivia: Botswana, Paraguay y Namibia”, según el sitio www.scidev.net.

NOTA DE APOYO
Lotes en el área rural sin fines sociales
La posesión de tierras en el área rural, es un tema que asigna el Instituto Nacional de Reforma Agraria (INRA), según el secretario de Medio Ambiente de la Alcaldía, Álvaro Orozco, pero los propietarios de estos terrenos, no cumplen con la función social que deberían tener dichos espacios.
“Estamos notando que de alguna forma, no se está cumpliendo la función social que se asigna en las áreas rurales, en donde se asigna a la persona un derecho propietario que puede ser para agricultura y ganadería, pero hay desde moteles hasta urbanizaciones”, afirmó.
El área rural, según Orozco, debe ser el pulmón de las áreas urbanas y si efectivamente contáramos

con el cumplimiento de un fin social en estas zonas, no se tendría un problema de deforestación en las mismas.
“En Tarija la solución está en que los terrenos que se doten a través del INRA, tengan un fin social y no para otros aspectos”, acotó.

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